HOLA, ¿HAY ALGUIEN AHÍ?

Respondo a mi propia pregunta: NO. De momento, no. Es pronto para que alguien visite el blog de este desconocido. Si has cometido la locura de visitar este, nuestro rincón, te invito a leer la prosa que yace, medio muerta, en él. Sí. Has leído bien entre líneas: los textos aquí recogidos luchan por sobrevivir en un momento de nuestra historia (la de un país maldito como he oído de alguna de las mentes brillantes) en el que pocos leemos literatura. Nos reconforta más otras prácticas como chatear, colgar fotitos, hacernos selfies, retos, ver influencers...Lo tengo muy jodido. Me siento en pañales y la única manera de salir adelante son tus comentarios. Tú eliges cómo quieres que sean: sinceros, zalameros, destructivos,...eso lo decides con libertad. Si has leído total o parcialmente alguna de mis idas y venidas literarias, o pseudoliterarias para ser más preciso, ya mereces toda mi admiración independientemente de que tu comentario me ponga de vuelta y media.

No sé si serás el primero y último que pise este blog. Seas quién seas y cómo seas: ¡BIENVENID@!(Acuérdate del himno de Miguel Ríos y da un par de saltos sacando unos bellos cuernos. Cuidado que nadie te malinterprete: ¡es solo el saludo del rock!